domingo, mayo 13, 2007

Proyecto ARAS Malpaisillo

APROXIMADAMENTE POR MARZO DE 2007...

En una de las reuniones semanales de coordinación, donde los codirectores de proyecto se reunen con la coordinadora general y adjunta, solicite, tal y como estaba en mi cronograma de actividades, poder visitar los proyectos bilaterales que tiene la AECI. Los que están fuera de Managua y son más visibles son el Proyecto CAFÉ en Jinotega, el Proyecto Araucaria XXI y el Proyecto ARAS Malpaisillo, el cual fui a ver ya que estaba en su fase final.

Lo que se ha hecho en este proyecto es una formulación inicial en base a las necesidades que tenía la población. Se decidió actuar en 13 comunidades de las más de cincuenta que tiene el antiguo municipio llamado Larraynaga (un luchador sandinista), en el departamento de León.

Una de las cosas que llaman siempre la atención es la distancia para todo: la distancia con Managua (dos horas y media en coche por caminos insufribles), la distancia que luego existe dentro del mismo municipio de Malpaisillo entre el casco urbano y las comunidades, etc. Por no hablar de cómo son los caminos (por llamarlo de alguna manera) para llegar hasta ahí.





En este proyecto se identificaron principalmente dos problemas: violencia de género y mejora de la habitabilidad básica; en otras palabras, las condiciones de las viviendas de las comunidades de Malpaisillo eran deplorables (decir que cuatro palos puestos sobre un techo de zinc y que la gente duerme sobre el suelo de tierra junto con las gallinas no es una exageración, sino una realidad). Y en lo que respecta a la violencia de género, aqui se observaban claramente signos de violencia en donde el hombre golpeaba a su mujer por el hecho de "tomarse atribuciones que no le correspondían" como por ejemplo, responder a unas preguntas del equipo técnico en vez de esperar a que su marido volviese de trabajar.

Aparte de estos dos componentes, también se ha invertido el dinero de la AECI en crear una comisaría de la mujer para atender los casos de violencia de género, se ha creado un instituto para que los chavalos puedan atender a sus clases y así aumenten sus posibilidades laborales de cara a un futuro, se ha mejorado un puente de acceso... Pero ahi no queda todo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Miguel de Larreynaga no fue un luchador sandinistas sino un prócer de la independencia de Nicaragua...