Recta Final como Mediador Intercultural

Pues eso, que ya pasado el ecuador de mi tiempo en los Servicios Sociales, sigo buscando trabajo. Pero antes de hablar de eso, voy a hacer un resumen de lo que he hecho como sociólogo/mediador.

Tal y como tenía programado inicialmente en el cronograma de mi trabajo en los Servicios Sociales que presenté al inicio de mi contrato, ya he desarrollado:

• Un estudio sobre la inmigración en el municipio, analizando comparativamente los inmigrantes desde los años previos a la crisis (2006) hasta la actualidad.
• He diseñado e implementado la encuesta a 42 solicitantes y perceptores de la Renta Mínima usuarios de los Servicios Sociales.

El día 13 de abril haré una presentación Power Point para todos los Servicios Sociales (- lo más amena posible, espero -).  Además, aún me queda por hacer en estos dos meses de contrato:

• Diseño e implantación de un taller “piloto” sobre habilidades sociales y personales para los inmigrantes usuarios de Servicios Sociales.
• Seguir reuniéndome con los representantes de las asociaciones.
• Hacer unas pequeñas fichas sobre empresas que se nutren fundamentalmente de trabajadores de origen extranjero (Ej. Grupo VIPS).

¿Qué he aprendido en todo este tiempo en los Servicios Sociales?

1. Que el trabajo comunitario que se hace con asociaciones hay que desarrollarlo con constancia y ser valiente y no esperar a que siempre tomen las asociaciones la iniciativa.
2. Que tan importante es la obtención de datos cuantitativos por medio de encuestas o bases de datos como lo es la obtención de información cualitativa a través de las entrevistas en profundidad que he realizado y la dirección de un grupo de discusión, lo cual me hizo recordar enormemente mis años universitarios.
3. He aprendido sobre derechos y deberes de los inmigrantes, actualizando cambios en la nueva normativa de inmigración gracias sobre todo a la charla en la que colaboré y con las reuniones con Eva, la asesora jurídica que contrataron a la par mía.
4. He aprendido también sobre el trato con los compañeros de trabajo, enriqueciéndome y aprendiendo a compartir, pero también a decir basta cuando ha sido necesario.