A finales del año 2006, la ONGD Infancia Sin Fronteras nombró a Antonio López, jugador del Atlético de Madrid, Embajador de dicha organización. Antonio López, de la mano también de la Fundación Atlético de Madrid, se aventuró en el mundo de la cooperación al desarrollo.
El objetivo del viaje era doble: crear una escuela en una de zona deprimida del departamento de Matagalpa, y a la vez, concienciar (y concienciarse) de lo hay por este lado sur de América: la pobreza que hace que miles de niños estén en las calles. Muchos de estos niños no entran a las escuelas porque sus padres no tienen dinero suficiente como para poder comprar el material escolar (a veces, ni la propia ropa de los chavales). El Estado nicaragüense, maltratado por la ineficiencia y corrupción política de la época corrupta-liberal del PLC con Arnoldo Alemán como máximo representante, no puede subvencionar ni otorgar becas a tanta gente pobre; si este país hubiera tenido políticos y políticas decentes y hubieran administrado todo el dinero proveniente de las ayudas que otorgó medio mundo a los afectados por el Huracán Mitch, muchas cosas así podrían haberse evitado. Pero hoy por hoy lo que se puede ver por las calles son niños correteando que aprovechan la mínima ocasión para acercanse a un 'chele' (blanco) pidiendo le algún peso para que pueda comer, mientras que el ex-presindente Arnoldo Alemán se encuentra podrido de dinero en arresto domiciliario (20 años de prisión por robar el dinero de las donaciones por el Mitch), y para colmo, a la espera que los corruptos jueces pro-sandinistas le saquen de prisión debido al Pacto Ortega-Alemán.
Pero como decía, Antonio López llegó a Matagalpa, una de las regiones más afectadas por el “dichoso” huracán en 1998. El jugador, en un gesto que le honra, se dignó a venir hasta Nicaragua para poner la primera piedra del que será el Centro Infantil Fundación Atlético de Madrid que podrán disfrutar unos 900 niños del barrio Paz y Reconciliación (nombre curioso, por cierto, ya que las palabras Paz y Reconcialiación pertenecían al lema político de los sandinistas en la campaña electoral).
Lo cierto es que me gustaría que el ejemplo de Antonio López se quedara más allá de la promoción del equipo como empresa (a veces me pongo pesimista y pienso así), y quisiera que de verdad cundiera el ejemplo de Antonio López entre el resto de jugadores y equipos de primera división del fútbol español. Así, pienso que la Liga Española debería crear, al igual que tiene la NBA estadounidense, una división que se dedicara a temas sociales, en donde jugadores de distintos clubes se preocuparan por el bien tanto de su propio barrio como de los más necesitados en otros países, como en este caso en Nicaragua. Pienso que se deberían crear programas como el Read to Achieve, otros que fomenten buenos hábitos alimenticios entre los niños... e incluso, ¿por qué no? Premiar a los jugadores que sean más solidarios.
En fin, son ideas que lanzo al aire. A ver si alguien dentro de la LFP las toma... quién sabe. Yo le comenté alguna de estas ideas a Óscar Jiménez, Responsable del Área Social de la 'Fundación Atlético de Madrid', que me explicó que su Fundación (de tan solo 3 años de edad) trabaja tanto en España como en otras partes del mundo; pero del dicho al hecho, hay un trecho, que dice el refrán. Mientras tanto, aplaudamos la loable acción de Antonio López, que alegró la vida a muchos niños y no tan niños de la comunidad matagalpina.
2 comentarios:
El gordo Alemán no es liberal. En todo caso, su liberalismo se conoce como liberalismo de Cantimpalos. No tiene nada que ver con el liberalismo de Hayek.
Los problemas de Nicaragua se deben precisamente a su alejamiento de las políticas liberales.
Por lo menos los jugadores del Atleti son solidarios. Eso sí, llevan años sin jugar un pimiento al fútbol...
Creo que el Barcelona también se va a pasar por Nicaragua a hacer otro proyecto solidario, ahora que lo mencionas. Lo leí ayer en un periodico nicaraguense. ¿Sabes tu algo de esto?
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