Todo lo bueno se acaba, y el proyecto llevaba ya más de 4 años, la fecha límite establecida al inicio del proyecto, fundamentalmente porque había retrasos con los pagos, cosa que ya veo es habitual world wide, y por mínimas estupideces burocráticas que lo único que hacen es ralentizar las cosas.
Aparte de la invitación a asistir al cierre en la semanal reunión de coordinación, se nos recordó por email la invitación a asistir, un viernes a las 2 de la tarde en Malpaisillo.
¿Quienes finalmente asistimos? Pues, por muy raro que parezca, de toda la gente que trabaja en los aspectos técnicos (es decir, no incluyo a algunos de los nicas trabajadores de la oficina), sólo los jovenes cooperantes (Ana, Yago y yo) fuimos los representantes que acompañaban a la coordinadora general y a la adjunta de la OTC. El cómo es posible que los propios compañeros de la oficina no asistan al fin de un proyecto que ha durado más de cuatro años, con todo el esfuerzo y desgaste personal que significa para la codirectora española del proyecto, Gema López... me hace alucinar. Esos otros codirectores de proyecto que no asistieron... ¿cómo se sentirían si sus propios compañeros de trabajo no les valorasen? ¿O es que no querían dejar de trabajar un par de horas en la tarde del domingo? ¿No les apetecía desplazarse hasta Malpaisillo para regresar el viernes noche, cansados? Repito, no me entra en la cabeza como muy a pesar de que te puedas llevar mejor con unos compañeros de trabajo que con otros, no se valore el trabajo realizado por uno de ellos.
Anyway. La presentación ante gran parte del pueblo de Malpaisillo se realizó en una gran explanada en donde hablaron el Embajador de España en Nicaragua, Jaime de la Cadena; el Alcalde de Malpaisillo; Amada López, la codirectora nica del proyecto o la presidenta del Instituto Nicaragüense de Vivienda Urbana y Rural (INVUR), que se marcó un pequeño discursito político a lo Daniel Ortega.
Todo concluyó con éxito. La gente salió contenta, y aunque no se pudo beneficiar a todo el pueblo, porque económicamente no resulta viable, sí que puede ser un pequeño paso para animar a que las cosas se hagan bien, a que se elimine la violencia de género, a que la gente adopte hábitos higiénicos saludables, etc. Esperemos que así sea.
Solo para terminar una cosa que me pareció curiosa de todo el acto, y es que estaba lleno con pancartas del estilo del marco lógico del tipo: "Superados los caso de violencia" o "Mejoradas las condiciones de Vida de las mujeres". ¿Es que los profanos entienden del lenguaje de la cooperación? ¿No hubiera sido mejor poner otro slogan o los datos sin parecer sonar pedante? Bueno, la respuesta es que todo el montaje no era para Nicaragua, sino para España.
1 comentario:
no era para españa era para la gente que trabjo de muy cerca con el proyecto, que despues de cuatro años de trabajo como bien dices usted ,ellos y ellas entienden las cosas y comprenden lo que se les quiere decir
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