A veces las cosas no salen como uno quiere. Uno tiene hecha su agenda, pero surgen dificultades sobre la marcha. Y más con una agenda tan apretada como la que teníamos el miercoles.
Aqui hay una expresión que se llama "Hora Nica". Esto significa que aunque estén previsto cualquier acto, institucional o no, los participantes puede que se presenten entre una y dos horas tardes. Supongo que por eso la gente no toda la gente se extrañó de que Chávez llegara tarde a la toma de posesión de Ortega y no prosiguieran con el acto de investidura.
El caso es que el Embajador español, Jaime de la Cadena, se presentó casi con dos horas de retraso con respecto a la agenda (mientras que extrañamente, el Alcalde de Jinotega llegó puntual y tuvo que esperar más de una hora, retrasando su agenda). Escoltado a su derecha por Begoña, mi compañera de despacho y co-directora del proyecto café de la AECI, y Elena Montobbio, coordinadora general de la AECI, llegaba también alguien que creía se había infiltrado en los actos: un señor con una gorra roja, pantalón vaquero y camisa a cuadros.
Era el Ministro de Agricultura, Ariel Bucardo.
Yo en este viaje había venido a conocer el proyecto café. De paso, ayudé con el tema de las fotografías que luego enviaríamos con la nota de prensa. Así que me senté en el Hotel Café a escuchar lo que decía Bego sobre su proyecto, mientras cuando podía, sacaba alguna foto, como del Embajador hablando, de Bego hablando, del Alcalde de Jinotega, etc.
Posteriormente, fueron los viajecitos. Escoltados por la policía, por delante y por detrás, tris trás, fuimos por unos caminos de cabras (por llamarlos de alguna manera) hasta llegar a nuestro primer destino: El Conglomerado de Café de Jinotega. Este lugar, por lo que me pude enterar leyendo los documentos sobre el proyecto, lo creó la AECI para que se reunieran todos los responsables de las cooperativas del café jinotegano y sirviera como foro de discusión para promover el café, hablar con los políticos, planificar acciones, etc. Vamos, una especie de sindicato cafetalero. En este lugar apenas pudimos estar más de 10 mins.
Posteriormente, vuelta al carro. Y vuelta a ser escoltados por la policia en ese camino de cabras, si llegaba a esa categoría el lugar.
Seguimos con nuestra apresurada agenda. Estuvimos comiendo en la casa de un cafetalero llamado Elías Zeas. Nos agasajó a todos los acompañantes con deliciosa carne asada, sopas, güirila, etc. Y eso que no eramos precisamente pocos los que íbamos.
Fuimos a un lugar habilitado con una pequeña carpa en donde había un encuentro con más productores cafetaleros. Allí estuvieron todos, se presentaron y brevemente contaron lo que hacían y lo que les había ayudado la cooperación española para mejorar su situación. Todo tuvo que ser rápido, porque Bego metía prisas: llevabamos varias horas de retraso con respecto a la agenda prevista y además, el Embajador se tenia que ir antes de lo previsto: a las 4 y poco de la tarde.
Nuestra última parada era el laboratorio de café y la desgustación de éste. De nuevo, ¡¡como no!! Camino de cabras y antes de llegar a nuestro último destino, todo a matacaballo.
Allí, seguimos viendo cómo se extrae el café de la pulpa del fruto, como se procesa, etc. Y vueltaaaa a Jinotega, al menos con una vista preciosa del lago Apanás de fondo.
Por último, me dieron 'raid' (me llevaron en carro) para Managua. Había sido un día tan agotador que, tras dos horas de viaje, me quedé algo dormido, como unos 20 mins, en el carro donde me llevaban. Y es que el ritmo del día había sido frenético.
Pd. Para más fotos del evento, visita www.jinotegalife.com
1 comentario:
Oye, me apunto eso de la hora Nica. Y anda que como se enteren algunos que yo me sé...
Qué crack el ministro de Agricultura. Dentro de lo siniestro aporta unas pinceladas grotescas.
Saludos.
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