En estas fechas navideñas, pareciera que se nos enterneciera el corozón. En el inicio de la época más fría del año, el invierno, parece que buscamos el calor a través de la solidaridad de los más desfavorecidos. Ahora que, llega el 7 de enero del nuevo año y sufrimos de una amnesia temporal que nos hace endurecer y enfríar nuestros corazones, aclimatándose a la temperatura del año.
¿Por qué?
¿Por qué sólo vemos un bombardeo de anuncios de las ONGs en Navidad? Un juguete, una ilusión. Médicos Sin Fronteras, con total independencia de políticos, "tu llamada puede salvar vidas", Plan International. Ayuda en Acción. El bolígrafo solidario... ¿Os suena todo esto?
Pareciera que las ONGs son conscientes y se aprovechan también de esto. También aprovechan para relanzar hacia finales de año las estrategias de asociación con empresas y sus departamentos de responsabilidad social corporativa o acción social.
¿Por qué la mayoría de los deportistas de futbol, baloncesto, tenis... pareciera que sólo son solidarios en estas épocas? Salvo contadas excepciones (Kanouté, Iker Casillas...), la imagen que se muestra de los deportistas son de chicos jóvenes, exitosos, ricos, fiesteros... despreocupados.
A todos vosotros, empresas que sólo veis la RSC como una oportunidad publicitaria más que una extensión más de vuestra empresa; a esos deportistas que piensan más en qué harán el sábado por la noche (después de sus respectivos partidos) que en cómo pueden aportar su granito de arena a los que más lo necesitan... Os voy a poner un ejemplo de
asociación empresas-deporte-acción social que se hace en Estados Unidos, concretamente en la liga estadounidense de baloncesto, la NBA.
La NBA tiene varios programas, entre ellos el
Read to Achieve (Lee para alcanzar) para animar a la lectura, la Campaña nacional del Bigote de Leche (
Got Milk) para concienciar a padres y niños de la importancia de beber leche para su crecimiento... son algunos de los programas de acción social en donde participan
ACTIVAMENTE, SEMANALMENTE los jugadores de los equipos de la NBA, como podéis ver en las
paginas de los diferentes equipos dedicada al trabajo social con su comunidad. Es más, desde la NBA se anima y se otorgan prestigiosos premios, como por ejemplo el
premio de la Ciudadanía J. Walter Kennedy o el otro gran premio en este sentido: El de
Asistencia a la Comunidad. ¿Para cuándo una implicación plena, de verdad, de los jugadores y empresas con sus comunidades? Creo que en estos tiempos de crisis
ES EL MOMENTO, hay que ayudar porque hay miles de razones para prestar nuestro apoyo a
los que más lo necesitan.
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